revista de cultura científica FACULTAD DE CIENCIAS, UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO
Busca ampliar la cultura científica de la población, difundir información y hacer de la ciencia
un instrumento para el análisis de la realidad, con diversos puntos de vista desde la ciencia.

 

       
 
  menu2
PDF 
               
  1

 
Estrés postraumático
 
Luis Raúl González Pérez
   
   
     
                     
                     
Estrés postraumático (ept)
Benjamín Domínguez Trejo, James W. Pennebaker,
Yolanda Olvera López
Editorial Trillas, 2009.
 
Este libro aborda un tema que ha sido poco tratado. Como sabemos los efectos que producen el estrés postraumático derivan de diversos eventos: ataques, abu­so, violación, desastres natu­ra­les, accidentes, cautiverio o por haber presenciado un acto violento o trágico; es decir, es consecuencia prin­ci­pal­men­te de la vida mo­der­na, que nos expone a las más variadas presiones, par­ticu­larmente a quienes vivimos en las ciudades.
 
Es una obra que nos en­se­ña cómo los efectos del estrés postraumático afectan gra­ve­men­te a quienes lo padecen ha­cien­do necesaria una atención inmediata, para lo cual se requiere un pronto diag­nós­ti­co, el tratamiento adecuado a seguir, así como personal capa­ci­ta­do para brindarlo. Con gran acierto señala que ante el pa­de­ci­miento debe haber cono­ci­mien­to y capacidad para ­saber tratar a la víctima, desde el primer con­tac­to. De esta manera, existe la necesidad de otor­gar un tratamiento a partir de un en­foque multidisciplinario que con­sidere las contribuciones de las dinámicas bio­lógi­ca, psi­cológica y social. Asi­mis­mo, se reconocen y valoran las apor­taciones que hace la far­ma­cología, la educación, la nu­tri­ción, el trabajo social, la legislación y la historia. Es decir, en el tratamiento se debe tomar en cuenta la naturaleza multifacética de este trastorno.

El libro también destaca que del estudio del estrés pos­traumático deriva una herra­mien­ta útil para la investigación de violaciones a derechos hu­ma­nos y la comisión de delitos. Particularmente previene y brin­da información sobre el tema con base en casos prácticos y señala los as­pec­tos a con­si­de­rar, orientando así la ca­pa­ci­ta­ción que debe tener el de­fen­sor de derechos humanos res­pec­to del manejo que hay que des­ple­gar en la atención a las víctimas. Particular­men­te, se resalta la necesidad de la apli­cación del tratamiento en sec­tores vulnerables como los familiares de desapare­cidos u otras víctimas de vio­lación de los derechos hu­manos, como los casos de tortura.

Recientemente se es­ta­ble­ció a nivel constitucional el de­re­cho de toda persona a guar­dar silencio, así como la correspondiente prohibición de la prueba confesional. Lo ante­rior tuvo el claro objetivo de evitar la práctica recurrente en nuestro país de maltratar física o psicológicamente a los detenidos a fin de que emitan una confesión, empleada como prueba o indicio para dictar una condena.

Al respecto, se debe decir que aun cuando es posible que la tortura haya disminuido sen­si­ble­men­te en los últimos años, no ha desaparecido del todo en México.

Con relación a este asunto se elaboró el Manual para la in­ves­ti­ga­ción y documentación eficaces de la tortura y otros tratos o penas crueles, inhu­ma­nos o degradantes, mejor conocido como Protocolo de Estambul, el cual sirve para dar las directrices internacionales aplicables a la eva­luación de aque­llas personas que aleguen haber sufrido tor­tura y ma­los tra­tos. Este do­cu­mento —que fue firmado por México—, establece los es­tán­da­res básicos que se deben atender y evaluar para las víctimas de estrés postraumático y de tortura.

Respecto de su aplicación, debemos decir que se tiene la idea errónea de que el estrés pos­trau­má­ti­co tiene que ser la principal consecuencia de la tortura, lo cual no es necesa­ria­men­te cierto. Recuerdo haber platicado el tema con Benjamín Domínguez Trejo, ex­po­nién­do­le que el estrés postraumático no siem­pre obe­dece a cir­cuns­tan­cias derivadas de tortura.
Por ejemplo, el estrés postrau­má­ti­co que su­fra una persona acusada de un delito y que se encuentre en prisión puede obedecer sólo a esa condición y no a que haya sido torturado. Por el contrario, tam­bién debe decirse que la ausen­cia de estrés no determina la no responsabilidad.

Por lo anterior tiene que existir gran cuidado en el diagnóstico que se emita. Pre­cisamente, este libro resul­ta va­lio­so por la información teó­rica y práctica que ofrece a cada uno de los diferentes es­pe­cia­lis­tas que participan en el diag­nós­ti­co del estrés postraumático. Particularmente, considero que será una herramienta de utilidad para quienes es­tán interesados en la de­fen­sa de los derechos humanos, por lo cual me congratulo y felicito a los autores.
 
  articulos  
_____________________________________________________________
     
 

Texto leído en la presentación por Luis Raúl González Pérez, abogado general de la UNAM.

 

 

como citar este artículo
Domínguez Trejo, Benjamín. (2009). Estrés postraumático. Ciencias 95, julio-septiembre, 76. [En línea]
     

You are here: Inicio Búsqueda Número revistas revista ciencias 95 Estrés postraumático